La rueda para trasladar agua que está liberando a las africanas y educando a los niños
«Hippo Roller» -y también otra rueda hidráulica llamada «WhaterWell», son algunos de los nombres del aparato que ha logrado que no sólo miles de niños en África vuelvan a estudiar, sino que también los hombres se incluyan en la pesada labor de recolección de agua, históricamente relegada a las mujeres.
Según la OMS, mil millones de personas viven, al menos, a una milla de una fuente de agua potable. Cada día se pasan 200 millones de horas recogiendo agua en el mundo, siendo las mujeres las que invierten un 25% de su día haciéndolo además, de manera perjudicial para la salud. Esta rueda hidráulica, WaterWheel, permite empujar 50 litros, ahorrando tiempo y problemas de salud, mejorando la vida de las personas más necesitadas.
Se estima que las mujeres indígenas y las niñas emplean hasta un 25 por ciento de su tiempo al día en recoger agua. Este tiempo, a menudo mantiene a los niños fuera de la escuela y se acorta el valioso tiempo que de otro modo podrían emplear las niñas en ir a la escuela y las mujeres en realizar trabajos generadores de ingresos para mejorar las finanzas familiares.
Cynthia es emprendedora y antropóloga. Ha pasado la última década de su vida en América Central, el sur de África y Asia. Durante estos años, se ha familiarizado con los retos y oportunidades presentes en las comunidades, en su base de la pirámide económica asociada con la falta de acceso al agua potable.
Cynthia creó Wello con un objetivo: crear productos y servicios que permitieran a las personas acceder a un agua segura y fiable e introducir oportunidades para liberarse del ciclo de la pobreza. Diseñó un dispositivo para transportar el agua de una manera más eficiente e higiénica: la rueda de agua, un recipiente redondo de 50 litros que permite a las personas rodar el agua de las fuentes de agua en lugar de llevarlo en sus cabezas.
Esto permite transportar de tres a cinco veces más agua de una vez, en comparación con los métodos tradicionales. Se hace de forma higiénica, con un tapón diseñado para que el agua no se vuelva a contaminar a la hora de usarla. La estrategia más segura para reducir la diarrea, según la OMS. Hay que añadir, que se ha diseñado con la colaboración de los usuarios con plástico de alta calidad y seguro para el uso humano, capaz de resistir al terreno más tosco. En este proceso, de la rueda que inicialmente idearon, de 100 litros, han pasado a la actual, de 50, mucho más fácil de manejar. La forma, además, recuerda al matka (recipiente habitual para recoger agua en India) y que significa “agua limpia”.